viernes, junio 22, 2007

AQUELARRE

INTERIOR CASA CURA/AQUELARRE

Tomas esta frente a su hijo, esta vez mas tranquilo, parece dormido y como si por un momento esa maldición que vive adentro de el lo hubiera abandonado. Sebastián respira lentamente, un pequeño vapor sale por sus labios rotos he hinchados.

Se abre la puerta de la oscura pieza y Tomas nota que es de día,….

6 años antes

Anochece, la gran chimenea en medio de la sala calienta el ambiente, las maderas secas se quejan en el fuego implacable que las retuerce, afuera el viento choca contra la casa, las ventanas se golpean contra los marcos, Tomás juega cartas con su hermana, cerca del fuego, sobre la alfombra. De pronto suena la puerta de entrada y todos la miran, el Tío Carlos se levanta del sillón donde lee el diario y se dirige a la puerta, la entreabre y se oye el murmullo de un intercambio de palabras, Tomás apenas puede ver una figura afuera, el viento mueve la pequeña lámpara de la entrada. El tío Carlos cierra la puerta y mira a los niños por unos segundos y se dirige al su escritorio.

Mas tarde saldría de su escritorio con los ojos rojos y es contaría una historia que no dejaría de llamarles la atención.
Si se fijan bien, en este pueblo el carnicero es igual al panadero y al lechero…hay una especie de maldición por que todos los malditos tipos son iguales.

Tomás no pudo dormir tratando de sacar de su cabeza los rostros iguales.